Pages

twitter Facebook
Montón de rocas
  • Inicio
  • Libros
  • Blog
  • Menciones
Acerca de mi negligente lectura de Almas Muertas (Gogol), de su confianzudo narrador y del triste final de su autor.


Si hablas castellano hay algo que no debes hacer cuando te enfrentas una novela rusa: Dejar una pausa de varios días en la lectura. Y es que, como todos saben, en aquellas latitudes nadie se llama ni Hugo, ni Paco ni Luis y eso hace que el nombre de cualquier personaje resulte un poco más difícil de fijar en la memoria.

Esa lección me ha llevado a descubrir una curiosa estrategia, totalmente inconsciente, que empleo en este tipo de libros. La voy a explicar con un ejemplo: En la página x aparece un personaje llamado Vishneprokomov. Entonces mi mente, flojaza, en vez de leer "Vish-ne-pro-ko-mov" prefiere ahorrarse energías y tiempo y sustituir el nuevo término por un "apodo". Es por eso que a partir de ese momento identifico al mentado personaje sólo como "Vish". Y así, a medida que sigue apareciendo la palabra Vishneprokomov, sólo leo las cuatro primeras letras para identificarlo y nunca el resto. Funciona bien. Pero si interrumpo la lectura y la retomo, digamos, cinco días después, y vuelvo a enfrentarme a la bendita palabreja, ya me olvidé por completo del alias y no tengo la menor idea de a quién se refiere ni si es ésta su primera aparición en la trama ni si se trata de un personaje conocido o un error de la imprenta o de un defecto de mi visión... Y me veo obligado a regresar varias páginas atrás para situarme en el contexto o incluso revisar algún capítulo pasado... Y así mi experiencia lectora, que debería ser relajante y entretenida, se convierte en algo pesado. Todo por no leer de corrido. Y me pongo saltón y refunfuño y termino echándole la culpa al autor de "hacérmela difícil" y abandono el trabalenguas una vez más.

Con Almas Muertas de Gogol me ocurrió eso pero, además, tuve que cambiar la versión del libro que estaba leyendo porque tenía muchos problemas de escaneado (sí, era una versión pirata y muchas palabras aparecían equivocadas) y la otra que conseguí tenía una traducción distinta,. Y ¿qué creen? Todos los nombres propios estaban escritos de forma diferente (porque, por ejemplo, Tschichikof se convirtió en Chichikov,) así que mis apodos ya no servían. Con todo eso, no es extraño que me haya demorado demasiado en terminar una novela que ni es muy larga ni es complicada. Pero ¿valió la pena? Sí.

A veces, cuando viajo en bus sin radio (sí,existen), cuando miro al techo en las noches de insomnio, o cuando hago una caminata nocturna para bajar una comilona brutal, se me da por hacer listas mentales de asuntos que no tienen ninguna importancia. Uno de esos jueguitos consiste en preguntarme qué música escogería para distraerme si quedara abandonado en una isla desierta sólo con un reproductor de música (con batería solares). La lista no puede exceder las cinco o diez piezas. Todas las listas de preferencias que haces (de comidas, lugares, películas, viajes y de eso que estás pensando) van cambiando a lo largo del tiempo a medida que vives nuevas cosas (es decir, a medida que envejeces). Es lo normal. Pero en el caso de la música hay una pieza que desde siempre se encuentra en los primeros lugares de mi ranking.  
  

Entradas más recientes Entradas antiguas Página Principal

Lo más leído

  • Invencible
    Tenía los ojos cerrados, amarilla la piel, recogidos los miembros. Salvo el pecho, que subía y bajaba rápido, el resto de su cuer...
  • Confesión
    [MICRORRELATO] Mientras las demás consumíamos las tablas del piso y las vigas de madera, ella se empeñaba en hacer túneles entre ...
  • La princesa intocable y el sable volador
    ¿Quieres meterle a alguien el gusto por la ópera? Hay una que tiene lo necesario para seducir a los nuevos. La protagonista es una princesa...
  • El libro de los amantes desquiciados
    Seguramente te ha pasado: Recuerdas que en tu adolescencia viste una película o una serie en la tele que te impresionó mucho y que no volvis...
  • Juguetes de la historia
    Apuntes de lectura sobre Guerra y Paz. A diferencia de lo que pasa cuando ves película o escuchas música,  en un libro tú pones la v...
  • El peso de los otros
    Aunque de tramas muy distintas, hay una sorprendente coherencia entre los relatos que componen  La Horda Primitiva.  Todos los textos son d...
  • Lastre
    Mi amigo Nelson se va. Deja Lima para vivir con aquél de quien se ha enamorado y con quien incluso firmará un documento que a la ...
  • Gigantes
     [RELATO] — ¿Para quién es? — Para mí. Me llamo Pablo. — Pablo. Muy bien. El escritor toma su lapicero y abre el lib...
  • Juerga, jerga y una novela multimedia
    A fines del siglo pasado había un lugar en mi pequeño universo en el que los juegos de palabras estaban a la orden del día: la cafetería de...
  • Afónicos
    Me salen otros gallos y vuelvo a pensar que no soy el mismo de antes. Terco, cambio la forma en que respiro e intento impostar la voz. ...

Autor

Pablo Ignacio Chacón

Pablo Ignacio Chacón

Soy autor de "Los perseguidores" (cuentos) y "Juanito Trapelas" (microrrelatos). En 2017 gané el Concurso de Microrrelatos de la Casa de la Literatura Peruana. Fui finalista en el Concurso Internacional de Cuento Juan Rulfo (2011), el Concurso Bonaventuriano de Cuento de (2015) y dos veces en la Bienal de Cuento Premio Copé (2000 y 2022).

Archivo del Blog

  • ►  2013 (1)
    • ►  noviembre (1)
  • ►  2014 (15)
    • ►  mayo (1)
    • ►  junio (1)
    • ►  agosto (1)
    • ►  septiembre (2)
    • ►  octubre (3)
    • ►  noviembre (6)
    • ►  diciembre (1)
  • ▼  2015 (19)
    • ►  enero (2)
    • ►  febrero (1)
    • ►  marzo (2)
    • ►  abril (2)
    • ►  mayo (1)
    • ►  junio (3)
    • ►  julio (4)
    • ▼  septiembre (2)
      • Número Uno
      • El comprador de muertos
    • ►  octubre (1)
    • ►  noviembre (1)
  • ►  2016 (12)
    • ►  febrero (2)
    • ►  marzo (1)
    • ►  abril (2)
    • ►  junio (1)
    • ►  septiembre (2)
    • ►  octubre (1)
    • ►  noviembre (2)
    • ►  diciembre (1)
  • ►  2017 (14)
    • ►  enero (2)
    • ►  febrero (1)
    • ►  marzo (2)
    • ►  mayo (1)
    • ►  julio (2)
    • ►  septiembre (2)
    • ►  octubre (1)
    • ►  noviembre (1)
    • ►  diciembre (2)
  • ►  2018 (6)
    • ►  enero (1)
    • ►  febrero (1)
    • ►  marzo (1)
    • ►  abril (1)
    • ►  mayo (1)
    • ►  octubre (1)
  • ►  2019 (3)
    • ►  diciembre (3)
  • ►  2020 (9)
    • ►  marzo (2)
    • ►  abril (2)
    • ►  julio (1)
    • ►  agosto (1)
    • ►  noviembre (1)
    • ►  diciembre (2)
  • ►  2021 (4)
    • ►  febrero (2)
    • ►  junio (1)
    • ►  julio (1)
  • ►  2022 (4)
    • ►  febrero (1)
    • ►  mayo (1)
    • ►  julio (1)
    • ►  octubre (1)
  • ►  2023 (9)
    • ►  enero (2)
    • ►  marzo (1)
    • ►  junio (3)
    • ►  septiembre (1)
    • ►  noviembre (1)
    • ►  diciembre (1)
  • ►  2024 (2)
    • ►  abril (1)
    • ►  mayo (1)

Etiquetas

Balzac (3) Bioy (1) Bryce (1) Cabrera Infante (1) Christie (1) Clemente Palma (1) Conrad (1) Dostoievski (1) Flaubert (2) Gogol (2) Hemingway (2) Joyce (1) Nabokov (1) Pamuk (1) Poe (1) Ribeyro (1) Salazar Bondy (1) Salinger (1) Sartre (1) Stendhal (2) Tolstoi (3) exposición (1) libros (3) música (9) rocas (36) ópera (4)

Visitas al blog

Los derechos de todos los contenidos presentados en este blog pertenencen a Pablo Ignacio Chacón. Con tecnología de Blogger.
Reservados todos los derechos © 2014-2024 a Pablo Ignacio Chacón

Blogger Templates Created By ThemeXpose - Designsrock